
La Historia de un director Oscarizado
Salir de ver una película de Almodóvar es y siempre será una experiencia nueva, sin embargo “Los Abrazos Rotos” es tan diferente y a la vez tan “como siempre”, que por ratos parece un Thriller de Hitchcock y en otros momentos hay lugares y paisajes comunes a cualquier otra cinta romántica, parece un Rossellini, dicen algunos críticos.
Lo cierto es que hay dos o tres escenas que nos devuelven a la genialidad del director manchego, la escena de Lena (Penélope Cruz) reponiéndose y maquillándose luego del vómito, la escena del protagonista ciego que pone las manos sobre la pantalla del televisor para “sentir” la imagen en la que besa a la mujer amada y la escena recientemente ciego en la playa guiado por un niño entre cometas y frente al mar.
Durante el desarrollo de la película Almodóvar coquetea como siempre con otras artes, hay cuadros maravillosos, vestuario exquisito, una banda sonora espectacular y un manejo sumamente estético de la grabación de las escenas de sexo.
Perdonamos por todo ello lo “agringado”, la peluca de Marilyn, los afiches a lo Andy Warhol, la escena del beso en la playa y las computadoras Apple.
Reencontramos al Almodóvar de siempre en la edición final de “Chicas y Maletas”, el Almodóvar de “Mujeres al borde de un ataque de nervios”, de “Átame” y de tanta comedia negra y comedia roja disparatada.

Penélope Cruz, vale ver la película, está soberbia.
Sinopsis oficial del film
Un hombre escribe, vive y ama en la oscuridad. Catorce años antes sufrió un brutal accidente de coche en la isla de Lanzarote. En el accidente no sólo perdió la vista, también perdió a Lena, la mujer de su vida.
Este hombre usa dos nombres, Harry Caine, lúdico seudónimo bajo el que firma sus trabajos literarios, relatos y guiones, y Mateo Blanco, su nombre de pila real, con el que vive y firma las películas que dirige. Después del accidente, Mateo Blanco se reduce a su seudónimo, Harry Caine. Si no puede dirigir películas se impone sobrevivir con la idea de que Mateo Blanco murió en Lanzarote junto a su amada Lena.
En la actualidad, Harry Caine vive gracias a los guiones que escribe y a la ayuda de su antigua y fiel directora de producción, Judit García, y de Diego, el hijo de ésta, secretario, mecanógrafo y lazarillo.
Desde que decidiera vivir y contar historias, Harry es un ciego activo y atractivo que ha desarrollado todos sus otros sentidos para disfrutar de la vida, a base de ironía y una amnesia autoinducida. Ha borrado de su biografía toda sombra de su primera identidad, Mateo Blanco.
Una noche Diego tiene un accidente y Harry se hace cargo de él (su madre, Judit, está fuera de Madrid y deciden no comunicarle nada para no alarmarla). En las primeras noches de convalecencia, Diego le pregunta por la época en que respondía al nombre de Mateo Blanco, después de un momento de estupor Harry no sabe negarse y le cuenta a Diego lo ocurrido catorce años antes con la intención de entretenerle, como un padre le cuenta un cuento a su hijo pequeño para que se duerma.
La historia de Mateo, Lena, Judit y Ernesto Martel es una historia de “amour fou”, dominada por la fatalidad, los celos, el abuso de poder, la traición y el complejo de culpa. Una historia emocionante y terrible cuya imagen más expresiva es la foto de dos amantes abrazados, rota en mil pedazos.

Reparto: Penélope Cruz (Lena), Lluís Homar (Mateo Blanco/Harry Caine), Blanca Portillo (Judit), José Luis Gómez (Ernesto Martel), Rubén Ochandiano (Ray X), Tamar Novas (Diego), Ángela Molina (madre de Lena), Chus Lampreave (portera), Kiti Manver (Madame Mylene)